El Departamento de Música de San Juan exige un edificio apropiado para trabajar
Dichos atractivos explican la tendencia de muchos sanjuaninos hacia la
música. El departamento de Música, perteneciente
a la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), alberga a 1.500 personas
aproximadamente, comprendidas en una franja etaria que va desde
los 6 a los 70 años. Estos se distribuyen en alumnos del Preuniversitario y
Universitario, docentes, integrantes del Centro de Creación Artístico Coral
donde funcionan los diferentes coros (Universitario, Vocacional,
PreUniversitario, de Niños y Jóvenes, Preparatorio y Los Jilgueritos), y el
Centro de Creación Artística Orquestal.
Sin embargo, a pesar de su significativo aporte cultural, la estructura edilicia para la enseñanza y
el aprendizaje de esta actividad es paupérrima. La Escuela de Música funciona
en un edificio construido de manera provisoria en el año 1966, en terrenos
prestados por la provincia y no alcanza a contener todas las actividades
del Departamento de Música.
Para ello se necesita una importante infraestructura que contemple las condiciones especiales que requiere la práctica musical. Dicha empresa se comenzó en el año 2013 con la construcción de la Nueva Escuela de Música, pero en el 2015 se paralizó la obra, con tan solo un tercio construido del total del proyecto. En el medio, quedó un gran abanico de actividades que se desarrollan en diferentes lugares y en condiciones inadecuadas.
Nacimiento de la Escuela de Música
En la década del 60 surgió en San Juan, el Instituto Superior de Arte (ISA), donde se unieron varios talleres artísticos que dictaba el gobierno en ese momento. El ISA funcionaba en el teatro “El Globito”, en el Parque de Mayo; pero en 1966 se decide la ampliación del Parque y el teatro fue derribado.
Fachada original del tatro "El Globito". Fuente: Diario Cuyo |
Más adelante, se fundó la Universidad Provincial Domingo Faustino
Sarmiento, y el Departamento de Música se incorporó en 1966 como Facultad de
Artes. La investigadora del Gabinete de Estudios Musicales, Graciela Musri,
afirmó al Nuevo Diario que en una investigación del gabinete descubrieron un
artículo de Diario Tribuna que decía que el 16 de abril de 1966, se entregaba
el edificio para la Facultad de Artes. “En realidad, el edificio eran casillas de emergencia y el terreno fue entregado por
el gobierno en calidad de préstamo” aseguró la investigadora.
Años más tarde, con la creación de la UNSJ en 1973, el Departamento de
Música se incorporó como una unidad académica perteneciente a la Facultad de Filosofía
Humanidades y Arte (FFHyA), y bajo dicha órbita se mantiene hasta la actualidad.
En el año 1970 se inauguró el Auditorio Juan Victoria y 4 años más tarde se crea la Orquesta Sinfónica de la UNSJ. Los integrantes de aquella primera Orquesta fueron músicos destacados del Teatro Colón, de la Filarmónica de Santiago y de otros importantes centros culturales del continente.
Además de los conciertos en el maravilloso auditorio, los reconocidos músicos daban clases a estudiantes sanjuaninos. El proyecto era ambicioso y por eso el ingeniero Juan Victoria solicitó los terrenos ubicados detrás del Auditorio para construir ahí la Escuela Superior de Música y un museo, entre otras actividades que proponía. Los terrenos le fueron otorgados pero la construcción no se concretó y la Escuela sigue funcionando en las casillas de emergencia desde hace 54 años.
La nueva Escuela, una solución
a medias
El inicio del proyecto de construcción de una nueva escuela de música en
la Universidad Nacional de San Juan data de 2011. Sin embargo, al día de hoy y
tras varios traspiés, la obra continúa paralizada. Después de colocar la piedra basal en 2013, dos años más tarde la
empresa encargada de la edificación (Salmax S. A.) abandonó la obra por
problemas económicos, con un avance del 35% de la totalidad del proyecto. A
fines de ese año la UNSJ convocó a licitación con el propósito de terminar la
construcción en el primer semestre de 2017, pero ninguna empresa accedió a
finalizar la obra con el presupuesto que destinaba la Nación. Dicha situación
se repetiría dos veces más hasta el 2018.
La vieja Escuela de Música que se construyó en la década del 60, se tuvo que desalojar el año pasado para hacer obras de refacciones. Así mismo, el precario edificio actual nunca tuvo las condiciones para contener todas las actividades que lleva a cabo el Departamento de Música y muchas actividades ya se realizaban por fuera de este edificio.
Reclamos y posibles soluciones en el panorama actual
El tamaño que ha alcanzado el
Departamento de Música hace que las medidas de “emergencia”, “paliativas” o
“provisorias”, no alcancen a ser una solución concreta al problema. La única salida definitiva es que finalice la
construcción del nuevo edificio para La Escuela de Música. Este objetivo lo
tienen claro desde el Departamento de Música, que en cada publicación en su
página de Facebook usa un hashtag para recordar que #MúsicaNecesitaSuEdificio; hasta el rector de la UNSJ, Oscar Nasisi, que repite en múltiples entrevistas
que el edificio de Música está primero en sus prioridades.
Los músicos, estudiantes de música y demás allegados que
conforman esta comunidad, están comprometidos con la causa y en diferentes
ocasiones expresan sus reclamos. Se manifiestan con abrazos simbólicos a la
obra inconclusa, con protestas con música en las calles del centro o en la sede
de la FFHyA, y en cada concierto en el Auditorio Juan Victoria. Rosa Garbarino,
decana de la Facultad de Filosofía en declaraciones a Radio AM 1020 aseguró: “Vamos
a estar en todas las luchas acompañado, la mayor frustración es ver este
edificio parado teniendo en cuenta la cantidad de chicos talentosos que salen
de acá y son reconocidos en el mundo”.
Protesta en la Facultad de Filosofía |
Músicos y público con carteles con el hashtag #MúsicaNecesitaSuEdificio, en el ultimo concierto del año 2019 en el Auditorio Juan Victoria |
Sin embargo, llevar a cabo un proyecto tan importante requiere una gestión para nada sencilla. Jorge Cocinero Raed,
Secretario de Obras UNSJ, aseguró el año pasado que para finalizar la primera
parte de la obra se requerían $65.500.000 de pesos. Y su totalidad
aproximadamente, 160 millones. Cifra que en este contexto seguramente aumente de forma considerable.
Al pertenecer a una Universidad Nacional, los fondos deberían salir de las
arcas del Gobierno Nacional. Sin embargo, el monto elevado y el contexto de
inestabilidad económica hacen que dicha empresa sea difícil de concretar. Por
su parte, el Gobierno Provincial en repetidas ocasiones se ha mostrado
dispuesto a colaborar. La ministra de Turismo y Cultura, Claudia Grynszpan, ha
dispuesto infraestructura de la provincia para que los alumnos estudien y ha ayudado
a refaccionar instalaciones de la Universidad. Nunca han hablado de financiar
el nuevo edificio, aunque tampoco han cerrado la puerta a esa posibilidad.
1 comentarios
Muy bien descripta la situación.
ResponderBorrar